jueves, 19 de junio de 2008

Como la noticia es de ayer, os pongo con urgencia este comentario festivo sobre nuestros festivos políticos, plumillas y tertulianos.

Mantecados de Estepona

La ingenuidad de algunos me conmueve. Y si estos algunos utilizan la pluma a favor de los socialistas de nuevo cuño, nada me es extraño. Y esto viene porque el otro día, leo en el más Digital de “Los Confidentes” la siguiente frasecita de un tal Cansado, de profesión: sus labores de desinformación en pro de la causa redentora.
El tema, “El caso Estepona” y la frasecita, lo que viene a continuación:
“Un nuevo episodio de malversación de la confianza que los ciudadanos depositan en sus representantes.”
Y es que este buen señor, tertuliano de todas las tertulias que en el mundo han sido, cree que la gente que vota es tan idiota como para “depositar su confianza en los políticos que participan en el carrerón electoral.”
¿O está despistado o se lo hace?
Lo que el votante deposita en su papuñeta es que, dado que no sabe lo que realmente pasa, (aunque lo sospecha), lo mejor es formar parte de los que no hacen nada, nada de niente, pero dejan hacer y deshacer, y a vivir que son dos días… Que trabajen los otros, los chiquilicuatres de la demoqué, y si cuela, ¡mi abuela!
Nada de Ilustración, nada de Pesquis o Cacumen, y hasta la próxima papelería electoral al servicio de los de siempre. Hoy te toca a ti y mañana a mi…, como en los viejos tiempos idos de Canovas y Sagasta.
Vaya con los tertulianos de pro. Leer tantas paridas digitales y lo único que descubrimos es la fobia que se tienen los unos a los otros, militantes todos liberados, de este o aquel otro bando que paga con nuestros impuestos.
Pero, señor, señor, ¿todavía hay dos bandos?
Lo que realmente sucede es que, como ni los unos ni los otros han escrito nunca, ni escribirán en “El Papus”, maldita la gracia que nos hacen, a los de corazón libertario, con su fraseología teledirigida.
Pero sigo leyendo y llega lo mejor cuando el mismo plumilla, que aparenta escandalizarse con el Mangis de las Estepas, nos advierte con admiración desatada, “que aplaude sin retórica a la dirección del PSOE por haber decretado la inmediata expulsión del alcalde de los mantecados.”

En lugar de escribir: “Todos a la carcel, sin distingos, y caiga quien caiga.”
Malaya los chupopteros o vivillos que presumen de trabajar por la libertad. ¿La libertad de quien?

Del bolsillo, tio.
¡Cuánto predicador de papel y cuanto predicador en la red!

Otro día, más…

El Blog de Onomatopeya

Las damas del crimen

Barcelona, 18 de junio de 2008

Puesto que sigo estando muy verde con esto del Blog, y no quiero que mis lectores (escasos por el momento) me abandonen, aquí os llega la introducción al ensayo sobre "Las damas del crimen", que abandoné tras las cien primeras páginas, desde mi escapada a la ciudad de Mallorca.

Nuevos vientos trajeron a mi vida nuevos intereses, y en eso sigo ahora, mientras preparo la edición de mi novela, finalizada en el islote, "La isla de las voces".

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LAS DAMAS DEL CRIMEN (Agatha y Cia.)
rai ferrer


Durante el último Festival de Grenoble, celebrado en octubre de 1989, se realizó una mesa redonda dedicada a la novela negra femenina, en la que participaron entre otras las escritoras, P. D. James, Sue Grafton, Mickey Friedman y María Antonia Oliver. La pregunta a debatir era la de siempre: ¿Existe una literatura policíaca especificamente femenina?
Después de dos horas de bizantinismos verbales, las autoras invitadas (todas ellas, señoras con mucha marcha), se pusieron de acuerdo en señalar que "no hay más que una literatura y que en ella conviven escritores buenos y escritores malos".

Como dijo alguien del público: "Un largo viaje para el que no hacían falta tantas alforjas".
Acallados los teóricos del rifirrafe y zanjado el tema de las "no diferencias" (que haberlas, haylas), pasemos al fenómeno de las damas del crimen y a su éxito en la actualidad, superior si cabe al de sus colegas de pantalón largo.

EL IMPULSO CRIMINAL

Escasas en número en los inicios del género, las mujeres abrieron la novela policíaca a la psicología, y gracias a su labor sabemos más de los motivos del crimen que de venenos y otras zarandajas (dejando aparte, por supuesto, el caso de Agatha Christie).
Sí, como decía Raymond Chandler: "Dashiell Hammett sacó el crimen de su vaso veneciano para llevarlo a la calle", escritoras de fuste como Ruth Rendell o Patricia Highsmith, abandonaron la calle para desvelar al lector los impulsos criminales de sus protagonistas.
Esta característica, que desde la publicación en 1943 de la novela "Laura", de Vera Caspary, marcó nuevos rumbos a un género bastante reiterativo, ha sido el principal condimento del grupo de nobles damas que nos ocupa, y ha influido de manera palpable en escritores varones de la talla de James Ellroy o Joseph Wambaugh. Y esto sucede porque, como decía P. D. James en Grenoble: "Nadie como la mujer para llegar al fondo de las cosas".

Sobre este estado de ánimo, o mejor dicho, sobre este estado de alma, indagan en lo más íntimo las protagonistas de las páginas que siguen, sin dejar para nada en el tintero aquellos temas que harían palidecer a los varones más preclaros: la virginidad, el impulso sexual, las relaciones afectivas, la bisexualidad, la menstruación o la muerte.
Además de su enorme sensibilidad, poco corriente entre los narradores másculinos del género policíaco, las mujeres aquí reunidas aportan a sus historias un aire de autenticidad y frescor, que ya quisieran para sí algunos de los autores de la llamada literatura con mayúsculas.

Junto a estas cualidades -tan comunes en las novelas de Kinsey Millhone escritas por Sue Grafton-, destaca en sus libros el rigor de los aspectos técnicos del relato, y la supresión de toda clase de tabues.
Asistir a la descripción de una autopsia narrada por la norteamericana Patricia Cornwell, o conocer por boca de la protagonista de "No llores mas, my lady", los pormenores de una violación, son auténticos platos fuertes a los que no estábamos acostumbrados.
Nada es ajeno a las damas del crimen especialmente, a las brillantes escritoras de los últimos años, tan incisivas como fascinantes. El amor, el odio, la venganza, los celos, la envidia, el sadismo... La literatura ha dejado de ser inocente en sus manos y la crueldad y la transgresión están a la orden del día.
Y ésta realidad incontestable, ocurre porque, como ha escrito el crítico y ensayista Juan Tebar (y cito de memoria), "Las mujeres tienen para la crueldad y la transgresión una sensibilidad bastante peculiar".
De su sabiduría para rastrear la maldad, y de su capacidad para contarla, hablamos en profundidad en "Agatha y Compañía", en un momento explendoroso del género, en el que, como aseguran los especialistas, "la novela policíaca está en manos de las damas". !Y menudas Damas¡

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Esto es solo un aperitivo para abrir boca (dado que ahora mismo estoy en manos del dentista), pero la realidad es que si toda va bien, en próximas entregas pasaré a algunos de los temas anunciados en mi primer Blog, que estoy seguro interesan más a los amigos de la revista STRONG.

En el entretanto, que Durruti os guarde.

Publicado por Rai Ferrer

Amigos blogueros:

Mis primeros pasos con el Blog, resultan tan novedosos para mi, que si no fuera por el amigo Leo Coyote, seguiría tan verde, o mejor dicho, tan azul como los Pitufos.

Pero piano piano, chi va lontano, y con esta premisa, os hago llegar el primer capítulo de mi libro (si no me lo secuestra la autoridad incompetente): Una artística ensaimada.

A ver que os parece.


Capítulo primero de

Una artística ensaimada

Doblers, doblers, doblers…

Mallorca es una isla en forma de ensaimada que hace aguas por todas partes. Una isla tumbada al sol, cuyo único objetivo son los doblers… o mejor dicho, la pasta.
De Andrax a Can Pastilla y de Soller a Pollensa, esta gran ensaimada rellena de satisfacción, ha pasado del campesinado al restaurant y de la calma chicha a la boite. Su alma, (si es que la tiene) no es de este mundo, porque su mundo es otro, y porque, por cuatro días que vamos a vivir, lo mejor es relajarse chupando del turismo y de lo que caiga.
A diferencia de otras islas de las muchas que salpican el Mediterráneo, Mallorca no se parece a nada ni a nadie, y siendo suya, es tambien de todos los que la visitan, si, como dicen sus gentes, antes de entrar dejan la pasta. La venturosa pasta que les han hecho más ricos y poderosos que los pobrecitos colegas de la península.
Del ruralismo a la cadena hotelera, el mallorquín de a pie vive de las migajas de los ricos, y el mallorquín sentado (pancha contenta), explica que la cosa marcha y que “aixó va bé”, incluso con el nuevo sexpartito.
Ahora, en el año dos mil ocho después de Jesucristo, algunos curas siguen predicando, las viejas castas continuan mandando y los nuevos caciques, desde el control de la comunicación, trapichean con las tierras de sus mayores, a mayor gloria de Dios y del bolsillo.

Doblers, doblers, doblers; that is the question.

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Aunque no lleva ilustración alguna, creo que lo dicho resulta bastante ilustrativo. Pero no os precipitéis, aun hay más y esto lo leeréis en los próximos capítulos.

Mientras tanto, seguiré estudiando con Leo Coyote para amenizar el Blog, en el que, si todo marcha bien, escribiré sobre otras muchas cosas, más interesante; como por ejemplo: los libros, los amigos, los viajes y el inolvidable "STRONG", tan lejos y tan cerca de mi corazón.

Que san Durruti os guarde.

EMPEZAMOS

Este solo es un ensayo.